Arriba, en mi jardín, cómo aroman el romero, la albahaca y las lavandas. Susurra un monte nativo entre los leños cortados; y el barro luego de la tempestad se despoja de su grávido perfume. Qué fiesta de lombrices no habrá bajo el manto de hojas agotadas de verdor. Fines de mayo después de la lluvia ...
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