A mí me encanta la idea de que todos tengamos acceso a ver deportes por tv. Soy un fan de Argentina, y de San Lorenzo.
Pero no estoy tan ciego como para no hacerme preguntas. La primera, cual es el costo de ello, porque si no hubiera algún costo, otros presidentes no creo que hubieran dejado pasar semejante asunto: regalarle al pueblo lo que el pueblo quiere, distraerlo y que los dejen tranquilos, mientras ellos hacen sus políticas.
Otra cuestión que me pone a pensar es cómo venden la idea, no le presto atención a los diarios Clarín o La Nación, porque ya sabemos que cualquier gesto político que venga de los K. será distorsionado para hacerlos ver como demagogia, pero lo escuché de la boca de la presidenta en uno de los tantos discursos donde se refirió al tema:
“El objetivo es que el pueblo vea eventos de cultura popular”
Frase que me preocupa. En principio porque me parece que la idea no es ver, sino participar.
Vamos a ser realistas, no se ha creado ninguna actividad en relación a la cultura o al deporte que permita participar a los que menos acceso tienen a esas actividades.
Mucho museo gratis, mucha noche de libros, y cosas por el estilo, pero en realidad, no hay participación, la mayoría “ve”, y no se detiene a nada.
Estamos en un momento de la realidad en que somos espectadores, nos colocan todo para que veamos, no para participar, la estrategia del reality está en todos los actos, nos colocan una casa para que veamos cómo otros viven una vida ociosa y muestran las miserias con las que se supone que está bien sentirse identificados.
Se supone que es normal ser tan malas personas, pasa en la realidad, en una casa, se muestra el pensamiento de los jóvenes, y entonces es normal ser egoísta, ventajero y ocioso.
Nos enseñan a ver y aceptar, eso sí con accesos para todos.
Me preocupa lo poco que se crea para participar.
Hoy, la idea “participativa”, está en internet, sentados en una silla, frente a una computadora, tirando ideas, o escribiendo como en este caso, o sencillamente interviniendo en post de otros.
O en otros medios, como los diarios, que ahora ya no tienen “cartas del lector” sino que hay “comentarios”.
Todo es así, para ver, o para participar de las redes sociales.
Clubes y actividades culturales reales, donde se participa, pocos y casi nada de publicidad para ellos.
Mientras, las escuelas, con sus propuestas de actividades no profesionales, sin salida laboral, sumergidas en la indiferencia de la administración Macri, absorbe gente ociosa, que no sabe qué hacer de su tiempo libre y no deja espacio a los que necesitan de ello, porque hasta para participar de ello hace falta un tiempo que el que realmente necesita de esa formación o tiene.
Estamos a la deriva, esa es la realidad, tenemos tanto para ver, que no nos damos cuenta que tenemos muy poco para realizar.
Estoy feliz con el futbol para todos, pero el árbol no me impide ver el bosque.
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