Una de las características de los perros pequeños es que suelen tener pelos sobre los ojos. Algunos de los dueños, desinformados, le “arreglan” el problema retirándole esos pelos, atándolos con gomitas o cortándoles el “flequillo”.

Los pelos sobre los ojos es precisamente una protección por el polvo en aquella razas que tienen sensibles los ojos, vulnerables con alergias, ácaros, obstrucción de lagrimales; en otros casos es un problema de exceso de humedad, o lagañas permanentes, para cada caso hay que saber qué hacer.

Las razas de pelos sobre los ojos, suelen mancharse en el lagrimal, cuando el pelo es negro, no se nota, por lo que los dueños no suelen darse cuenta del problema y éste avanza hasta provocarles situaciones crónicas de enfermedad en los ojos a la mascota.

A diario, debe revisarse los ojos de los perros, en caso de encontrar alguno de los síntomas de anomalías, usar una gasa húmeda para limpiarlo, empezando en el extremo interno, recorriendo el borde del ojo, hacia afuera. Esto es difícil, pero hay que tratar de hacer rápido, antes que el animal reacciones con movimientos para zafarse.

Si se lo hace desde que es bebé, el perro sabrá tener paciencia para soportarlo.

Si se deja de realizar, y se acumula lagaña o suciedad en el ojo, el perro usará la garra para sacarse la molestia, lo que le provocará una situación peor.

Los ojos de los perros, en la mayoría de las razas, deben estar brillantes, si se les nota algo, no hay que dejarlo, hay que intentar limpiarle el ojo, dejarse estar agravará la situación y se puede estar dejando una puerta abierta a las infecciones.

Cuando hay varias personas de la casa interponiendo cuidados y mimos al mismo animal, suele ser contraproducente que todos realicen las mismas acciones de cuidados, en muchos casos, todos asumen que el otro se ha ocupado.

También ocurre que los pequeños detalles de cuidados que los dueños dan por hecho, no es registrado por los otros, y en cuanto el dueño no pudo realizar la acción o tuvo que viajar, se descuida este aspecto importante de la salud del perro.

Lo ideal es tener un registro de los cuidados que se realizan para el perro, vacunas, visitas al veterinario, datos del lugar a donde asistir en caso de emergencias.

Para este tipo de registro no es mala idea adquirir un Álbum de mascotas para registrar no solo los momentos de la mascota, sino también sus necesidades, pues si hay que dejarlo transitoriamente al cuidado de otras personas puede volverse un problema.

No es mala idea pasar de vez en cuando por la veterinaria, sin el animal, para actualizarse sobre nuevos productos para el cuidado de los ojos de las mascotas, asi como para evitar las manchas negras que se generan a su alrededor, si bien es una característica de las razas pequeñas, caniches, maltés, no debe ser permanente, sino que hay que tratarlo.

En la actualidad se encuentran tratamientos, en forma de polvo, que se le puede agregar a la comida, espolvoreándola, con el efecto de ayudar a que el nuevo pelo crezca más sano y resistente a las bacterias que se adhieren a esa zona de los ojos.

Las manchas en las patas y el hocico suele tener el mismo origen, con lo que los productos que se agregan a los alimentos ayudan en el resto del pelaje de lugares sensibles.

Siempre hay que consultar con el veterinario, pues cada raza tiene su particular forma de reacción a los elementos externos, pero en su mayoría, no hay contraindicaciones.