Hay amigas mías que jamás han hablado con sus padres de sexo. Todo lo que conlleve para ellas la palabra “sexual” está semántica y conversacionalmente a kilómetros de distancia de sus progenitores. Si soy sincera, yo hoy en día tampoco hablo mucho de este tema con ellos pero por otros motivos:
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Porque tengo casi 27 años y a estas alturas estoy más informada yo que ellos.
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Porque les veo “de Pascuas a Ramos” y tengo millones de cosas más importantes que contarles.
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Y sobre todo: porque a lo largo de mi infancia y mi adolescencia, pusieron a mi disposición toooooodos los medios para que estuviera bien informada.
HABLAR DE SEXO CON TUS PAPIS DA PALO
Sí. Es la verdad. Da corte. Siempre te provoca risa o vergüencilla el estar viendo la tele con tus padres y que salga la típica escena medio porno en la peli de turno.
Así que no te digo nada lo de ir a tener una conversación “profunda con ellos”. Pero, aunque no te lo creas… ¡Se pueden tener! Si te preocupa algo, si tienes preguntas, si te están pasando cosas extrañas en tu cuerpo que no entiendes… ¡Habla con ellos! Son los que mejor te conocen y podrán proporcionarte toda la información que necesitas. Piensa que antes que tú, ellos también pasaron por eso. Y si tienes un susto mientras mantienes relaciones sexuales, del tipo…se me ha roto el! o te surgen dudas de cómo conseguir un anticonceptivo de urgencia, además de tus amigos, tus padres siempre estarán ahi! Incluso puedes visitar una tienda erótica con ellos.
LA HISTORIA DE LA ABEJITA YA NO SE LLEVA
Queridos padres, la historia de la abeja y la polinización de la flor… ¡Está pasada de moda! Yo no soy una experta en la materia, puesto que no he tenido hijos, pero os puedo contar la forma en que mis padres se las ingeniaron para que no me quedara ninguna duda y creciera viviendo y disfrutando de mi sexualidad:
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Haciendo del tema algo NATURAL
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Haciendo del tema algo ACCESIBLE
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Haciendo del tema algo COMPRENSIBLE
Y utilizando lo que más me gustaba: los libros. Así, junto a la “Cenicienta” leí “De dónde vienen los Bebés“, pasé por “Barco de Vapor” y “¿Qué es la regla?“, para terminar con novelas clásicas y “En tu casa o en la mía” (libro que causó furor entre mis amigas, he de decir). De esta forma todas sus aclaraciones se veían respaldadas por materiales atractivos, que podía leer y releer tranquilamente en la intimidad de mi cuarto. Y tenía estupendas fuentes de consulta para aquellas cuestiones que me resultaban… ¡más vergonzosas!
Papis, no sabéis cómo empezar a hablar de sexo con vuestros hijos… ¡Acudid a los libros! No sólo existen estupendos manuales para vosotros, sino que pueden ser un buen regalo para empezar a romper el hielo en estos menesteres con vuestra prole. ¡Suerte!
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