A veces parece que ya estamos acostumbrados a las crisis económicas y sociales consecutivas que nos ha tocado vivir; y entonces, seguimos con nuestra vida, con nuestras responsabilidades y nuestro trabajo, inconscientes a cómo nuestro cuerpo y nuestra mente va acumulando poco a poco todas esas tensiones. Quizá acaben explotando, o quizá, por suerte, acabemos tomando conciencia de ellas y de una realidad innegable con tiempo suficiente para evitar ese estallido: necesitamos vacaciones, a ser posible en un sitio bonito, variado, agradable y lleno de naturaleza. Hay muchos destinos, en cualquier época del año, que responden a todos esos objetivos, pero hay uno que además está en casa: Menorca. Esta isla sin duda es una de las mejores opciones vacacionales que existen tanto por sus playas y sus paisajes naturales, como por su cultura, su gastronomía, sus pueblos y sus ciudades. Solo necesitamos reservar el viaje y buscar con antelación ofertas de alojamiento en Menorca.

Atendiendo a esta última cuestión, el alojamiento, este destino ofrece, como cualquier otro, hoteles y apartamentos de calidad. Pero si buscamos algo original, algo que nos permita disfrutar de la arquitectura tradicional menorquina, en un ambiente hogareño en el que al mismo tiempo no renunciemos al lujo que siempre buscamos en este tipo de establecimientos, sin duda deberíamos decantarnos por el alquiler de casas en Menorca. Cualquiera de ellas, sea cual sea su ubicación, han sido diseñadas y construidas con la idea de ser un espacio íntimo y privado en el que descansar y desconectar, lo que resulta muy agradable si además hemos pasado un día de paseos y excursiones. Por otro lado, suelen incluir terrazas, piscinas, jardines y césped, siendo esto también ideal para que los niños, en caso de haberlos, puedan correr y jugar a placer mientras los adultos recuperan fuerzas.

Si finalmente nos decantamos, muy acertadamente, por las casas menorquinas, el verdadero reto reside sin duda en escoger una. Lo cierto es que cualquiera de ellas presenta un encanto singular. Por ello, a la hora de escoger villas en Menorca debemos tener en cuenta factores como las ofertas ya mencionadas, o nuestros propios gustos personales.