Nuestra salud mental exige autocuidados que resultan esenciales para mantener al mínimo nuestros niveles de estrés o, si padecemos algún trastorno psicológico recurrente, de ansiedad o depresión. Pero el autocuidado no es lo que muchas personas tienden a creer que es. Beber alcohol porque te gusta o comer alimentos grasos cada día es justamente todo lo contrario al autocuidado, ya que a largo, de hecho a corto plazo, generará una situación nociva y nefasta para nuestra salud. El autocuidado es, por el contrario, esforzarnos en hacer aquello que tal vez nos cueste, pero sabemos que es positivo para nosotros.

Por ejemplo, limpiar la casa. No es sencillo hacerlo, puesto que apenas solemos tener tiempo libre debido a nuestras responsabilidades personales, familiares o laborales. Pero cuando conseguimos ponernos a ello y vemos el resultado, nos sentimos automáticamente bien. Vivir rodeados de limpieza genera confort. Si, además, creemos en el poder mental de los conjuros domésticos para atraer la buena suerte, podemos incluso llevar a cabo un ritual para limpiar la casa. Mientras limpiamos el polvo, generando bienestar físico, podemos llevar a cabo este rito para limpiar también nuestro hogar de cualquier energía negativa presente. Eso es bienestar mental.

El ritual mencionado, así como otros similares, como el ritual abre caminos, son de hecho también muy positivos para nuestra salud mental, en el sentido de que el ejercicio de meditación y visualización que conlleva nos impulsa a entrar en trance, y por lo tanto a acariciar un estado relajante, de intimidad y de paz, que no solemos tener en nuestro día a día. Nos rodea el ruido, la inmediatez y el conflicto. Por eso, mientras nos concentramos en silencio y a solas para realizar cualquier ritual para atraer la abundancia, nuestro cuerpo y nuestro espíritu se calman; y ello, de hecho, también es de gran ayuda si queremos intensificar las probabilidades de éxito del hechizo.

Para concluir, no debemos olvidar que negar nuestro estrés no servirá de nada. No vivimos tiempos fáciles, la pandemia del coronavirus ha cambiado de súbito nuestro modo de vida. Por eso, el autocuidado y los rituales nos ayudarán.