Vivimos en una época en la que la seguridad nuestra y de nuestros seres queridos pasa por la distancia social. Si bien esta realidad en el año de la pandemia de la COVID-19 es complicada, tenemos la suerte de que nos ha pillado en la era de internet, por decirlo de una manera coloquial. Estamos viendo que hoy en día todo es adaptable al entorno virtual, desde el teletrabajo hasta la formación básica y complementaria. De hecho, antes de este convulso año 2020 ya veíamos que era relativamente sencillo acceder a cursos en línea y trabajar desde casa en muchos sectores, como el marketing digital o el periodismo.
Esto también implica a las tiendas electrónicas o e-commerces, que tampoco son una realidad reciente. Ya desde hace años es sencillo encontrar tiendas especializadas en todo tipo de productos, como librerías, comercios de muebles, electrónica, etc. Pero también han proliferado desde hace un tiempo los negocios que venden objetos variados, desde complementos alimenticios naturales hasta tecnología de toda clase para el ámbito doméstico y profesional. Este año deberíamos acostumbrarnos todavía más a hacer compras online para evitar aglomeraciones y llenar el aforo de los comercios, de modo que es buena idea acostumbrarnos a este tipo de tiendas.
Porque, por entrar un poco más en detalle, en este tipo de negocios online no solo podemos encontrar productos de dietética o nutrición como los complementos alimenticios, sino también tenemos la opción de obtener productos de limpieza para el hogar, algo básico sobre todo en un 2020 en el que tenemos que desinfectar más a menudo nuestras pertenencias. También, y ya dentro del ámbito de la tecnología, es fácil comprar móviles online, lo que nos facilita no solo comunicarnos con nuestros seres queridos en la distancia, sino flexibilizar el teletrabajo al aumentar la posibilidad de conectarnos con nuestra empresa desde cualquier lugar.
Las posibilidades que nos ofrece internet durante la pandemia del coronavirus son, pues, numerosas, lo suficiente como para que no tengamos que preocuparnos por salir de casa demasiado a menudo. De hecho, cuando la crisis sanitaria se acabe, podemos seguir comprando en e-commerces.
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