Por regla general, decidimos eliminar los dulces de nuestra dieta porque metemos en el mismo grupo a la bollería industrial con la bollería artesanal. Sin embargo, los dulces también son un alimento a incluir en nuestra dieta diaria, aunque con moderación, porque sus ingredientes principales son harina, leche, mantequilla, huevos, azúcar y deben formar parte de nuestra nutrición.

La repostería artesanal elabora sus productos a diario con ingredientes de calidad. El resultado es un exquisito dulce hecho con mimo y libre de conservantes, colorantes y saborizantes artificiales, un placer para disfrutar como postre en cualquier celebración, los famosos roscones de reyes y turrones con o sin azúcar para las fiestas navideñas, buñuelos de viento y huesos de santo para la festividad de todos los santos, las tradicionales tartas para la celebración de cumpleaños... o, simplemente, unas torrijas de leche y miel para empezar el día con un apetitoso desayuno y darnos un capricho sin la necesidad de tener algo que celebrar.

Las fábricas de pastelería, ver aquí, elaboran tanto productos artesanales con ingredientes de máxima calidad y nutritivos, (en este caso al no incorporar ningún tipo de aditivo para su conservación, se trata de dulces que deben ser elaborados a diario y consumidos al momento para que no pierdan ninguna de sus propiedades nutricionales, ni su textura y frescura inicial) cómo pastelería industrial, los ingredientes son los mismos y con las mismas cualidades y calidad que los artesanales, lo que los diferencia es la incorporación de aditivos para una mejor conservación.

Así pues, toda la pastelería trabajada de forma artesanal precisa de una conservación en frío y evitando los cambios bruscos de temperatura que deteriorarían el producto, la pastelería industrial no es tan delicada y nos da un mayor margen de tiempo para consumirla sin que se estropee, lo que la hace más aconsejable para determinadas ocasiones.

Los productos de pastelería industrial y artesanal no dejan de ser un alimento a incluir en nuestra dieta, siempre que se consuman con moderación. ¿quien puede resistirse a darse el capricho de saborear un rico roscón de reyes, unos pastelitos artesanos o una exquisita tarta para endulzar una comida o una cena?