Las casas prefabricadas son una buena alternativa para tener una casa en propiedad, sin tener que hipotecarnos de por vida, su coste económico es inferior al de una casa tradicional. Pero hay un factor importante a tener en cuenta, el terreno dónde vamos a instalarla y que tiene que ser de nuestra propiedad.
Lo más recomendable es que se encuentre cerca de la ciudad, máxime si tenemos niños pequeños, es importante contar con la proximidad de colegios, centros médicos, tiendas, farmacias...
Es aconsejable barajar varias opciones y asegurarnos de que se trata de un terreno edificable. También informarnos sobre las normativas de construcción y permisos del ayuntamiento. Si no tenemos en cuenta este aspecto, corremos el riesgo de que una vez que tengamos nuestra casa prefabricada instalada, nos la hagan quitar.
El terreno debe estar nivelado para desechar posteriores problemas de estabilidad. Si hay desnivel, tendremos que asumir un gasto extra para allanarlo antes de colocar la vivienda.
La gran mayoría de las casas modulares son casas ecoeficientes, se trata de aprovechar al máximo los recursos naturales en aras de conseguir el máximo ahorro energético. La orientación de la casa es fundamental para aprovechar la luz y el calor del sol, además de una buena elección en los materiales, sistemas de aislamiento... en definitiva, una casa con el máximo confort y el mínimo consumo energético.
Podemos disfrutar de una bonita casa de diseño a un precio asequible y que nada tiene que envidiar a las de construcción tradicional. La calidad del diseño y la estudiada arquitectura de las viviendas, permite crear casas de un estilo rústico, cosmopolita, moderno o, incluso, casas de arquitectura singular de estructura asimétrica ¡verdaderas obras de arte!
Si te preocupa el medioambiente y eres de los que quiere contribuir a conservarlo, puedes comprar una casa ecológica y sostenible, estudiada para producir el menor daño ambiental posible y un considerable ahorro de energía. |