Es normal que siendo el propietario de tu negocio dudes de la honestidad de los trabajadores. Porque, y más en España, se tira siempre de picaresca. Como jefe debes estar siempre alerta ante cualquier tipo de engaño por parte del empleado. Una de ellas, y que ha aumentado en los últimos años es la baja fingida. Por lo que sea. Todo vale.

Lo dice la Seguridad Social, que no es poco, más del 20% de las bajas son fraudulentas. Realmente es complicado para un médico creer o no en la palabra del paciente. ¿Y si nos está engañando a todos? De por sí, creemos en el buen hacer de las personas. Al fin y al cabo, la mayoría alega tener problemas de ansiedad y de estrés. ¿Cómo, bajo qué fundamentas que es mentira? Es prácticamente imposible. La única herramienta con la que cuenta el médico es la observación, de poca fiabilidad.

Ya lo dice el detective Javier Bellot: "Durante la época de bonanza económica, los empleados caraduras cogían la baja para quedarse en su casa y disfrutar de la nómica que cobraban sin trabajar. Ahora (con la crisis) lo hacen para poder pluriemplearse y ganar más dinero, pero en negro". Según datos estadísticos, tras contratar a un detective privado, en el 80% de los casos se descubre que, efectivamente, el trabajador había fingido su enfermedad.

La tarea de los investigadores es sencilla, investigar y vigilar a su empleado y aportar pruebas que puedan ser utilizadas ante un juez. ¿Cuál sería el resultado de esta investigación? Si realmente se demuestra que la baja fue fingida, el resultado sería un despido objetivo sin derecho a indemnización de ningún tipo. Acércate a los detectives privados, y los resultados serán siempre positivos. Quítese ya a esos trabajadores absentistas que lo único que hacen es perjudicarle tanto a usted, como a sus compañeros, como a su empresa.