Ya sé que está mal lo que voy a contar. Ya sé que con conductas como esta podría ocasionar un problema a terceros e incluso podría generármelo a mi mismo, pero precisamente porque admito mi error es que lo voy a contar. Me gustaría que se tomara como referencia para que otras personas que se vean en la misma situación que yo no hagan lo mismo. El caso es que la semana pasada me iba de viaje con unos amigos. Se suponía que mi chica me llevaría al aeropuerto y en teoría íbamos bien de tiempo. A última hora, cuando ya estábamos hasta sentados en el coche, la llamaron por teléfono para decirle que su sobrina había estado enferma toda la noche y que si por favor podía quedarse con ella, ya que mi chica no trabaja.

Mi cuñado necesitaba que mi novia fuera desde ya para su casa porque no podían dejar a la niña sola (tiene cuatro años), así que no le quedó más remedio que ir. Cuando llamé a mis amigos, resulta que ya habían salido y estaban de camino al aeropuerto, y no había nadie más que pudiera llevarme. Total, que tuve que decirle a mi chica que me alcanzase a casa de nuevo a coger mi coche. Ya nos habíamos retrasado bastante, así que si me apuraba con suerte podría facturar la maleta.

Cogí mi coche y apreté el acelerador. No fui a 200 km/ hora ni tampoco a 150, pero sí que rebasé los 120, algo que nunca hago. Gracias a los avisadores de radares me fui guiando para que no me pillasen. Gracias a Dios, no me llegó ninguna multa, pero sí es cierto que de nada me sirvió la velocidad porque cuando llegué ya no me dio tiempo ni de facturar. Tuve que dejar montón de cosas atrás para que la maleta me pesase solo diez kilos.

Os lo aseguro, más vale llegar tarde que nunca, así que no cometáis la imprudencia que yo cometí porque encima no os va a servir para nada.