Mucha gente ve la soltería como algo malo. Lo cierto es que yo soy un poco ese tipo de persona a la que también le gusta tener pareja, y cuando me vuelvo a quedar soltero lo paso un poco mal. Sin embargo, algo bueno que tiene no tener pareja es que “el mercado vuelve a abrirse”; siento decirlo así, no pretendo sonar machista, pero mi afirmación encierra parte de verdad: estoy libre para cortejar a cualquier mujer que me guste y que, evidentemente, se me ponga a tiro. El problema es si, como yo, acaban de salir de una relación larga; yo lo hice y me descuidé bastante, porque claro, mi mujer me quería tal y como fuese. Sin embargo, es innegable que en los últimos tiempos he engordado bastante.

Por eso, he decidido tirar la casa por la ventana adelgazando y, además, poniéndome un poco cachas; pero no yendo al gimnasio, no, sino haciendo algo mejor: comprándome un aparato de gimnasio, uno que sea mío y únicamente mío. Tengo suerte, porque hace poco descubrí la existencia de una tienda, la cual se encarga de compras online de toda índole. La descubrí buscando accesorios de cocina que no encontraba en ninguna tienda física (sí, sé cocinar, soy todo un partidazo) y aunque al final no compré nada, me quedé con su nombre y guardé la url. Nunca se sabía.

Y en efecto, al final sí que lo supe. Me decanté, buscando en la página, por comprar bancos de musculación. Cuesta tan solo 79'90 euros. Toda una ganga. Y claro, si todo me salía bien, no tardaría en estar tan cachas como el tipo de la fotografía; entonces podré gritar “¡mozas, a mí!”... eh... y me disculpo una vez más si he sonado machista, porque mi única intención es hablar con cierto humor.