Hace poco leí que hay algo así como una polícia-botón de contenidos de sitios.
La verdad que me parece algo raro que alguien se dedique a botonear los contenidos de los sitios sin otro propósito que per jodere, ya que esa actividad siempre beneficiará a alguien de manera que las denuncias, si fuera posible hacerlas, deben ser por miles.
En España, se hacen llama: “La Coalición de Creadores e Industrias de Contenidos”, que parece un chiste.
Supuestamente armada por autores, creadores, gente que diseña o crea material, música, letra, en fin, cualquier cosa que se pueda afanar de la web, ellos la protegen, botoneando al transgresor.
Para mi, todas esas medias, al único que joden es al usuario desprevenido, que baja material, lo utiliza, inocente de su origen, y de última es al que acusan y encuentran, porque los considerados piratas ya están de vuelta de los procesos esos y saben cuidarse.
Lo que me llama la atención de esa noticia es la exigencia con que interpelan al gobierno para que implemente políticas que eviten el pirateo de obras.
Los gobiernos, para mi, están bastante desconcertados en políticas de seguridad, ¿ustedes se los imaginan persiguiendo a uno que se bajó un mp3?
¿Soy al único que le parece desproporcionado propósito?
Lo que creo es que en ese tipo de cosas van a terminar cayendo los perejiles y los que se benefician seguirán beneficiándose, como siempre.
Tengo entendido que para proteger la propiedad intelectual ya hay un organismo que se ocupa de eso en donde se registran las obras, los autores disponen de un instrumento legal para accionar contra la copia, plago, etc. ¿Por qué no se usa ese recurso?
No sé debe ser que no entiendo mucho del asunto y se me escapa la necesidad de ocupar recursos policiales que pueden perseguir a ladrones y delincuentes en el mundo real y no parecen muy efectivos, para distraerlos en persecuciones virtuales.
No sé, me parece.
Mientras, se exige el cierre de algo así como 200 sitios que se “sospecha” de piratería, nunca una prueba fehaciente, nunca una realidad.
Es una caza de brujas, ni más ni menos.
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