Una para el lado de lo bueno, un niño tendrá dos madres, se llama Vicente y es desde ya, así, tan pequeñito un emblema del triunfo en contra de las luchas contra la discriminación.

En buenhora.

Ahora los niños tienen muchas más oportunidades de estar en hogares donde son deseados y les dan ese amor incondicional de los niños muy deseados.

Me da felicidad saber que el mundo avanza en la dirección de la tolerancia y la sensatez.

Mientras, esperemos que la humanidad comprenda y no llenen a ese niño de situaciones estigmáticas que puedan marcarlo mal.

La ley no ha hecho más que convalidar lo que ya existe hace años: las mujeres se hacen cargo de los niños, juntas, en pareja, en forma invisible para el exterior, debido a una ley que no las amparaba, ahora no pasa más que se ha vuelto legal y ya no hay por qué esconderse.

Para mí, es una alegría que en nuestro país comencemos a abrir la mente y dejemos de lado los prejuicios.

Me alegra ver que hay en general una apertura, la tv contribuye bastante en cuanto a que hay homosexuales mostrándose e incluso desacralizándose las palabras, es común escuchar puto o gay sin que sea un insulto, y dándole una connotación más bien humorístico, ya no son palabras que generen insultos.

Los propios homosexuales se refieren a sí mismos con humor, se brindan, son alegres y nos alegran, ya no nos importa qué hacen entre sábanas.

Es bueno saber que la hipocresía va desplazando sus límites y comienza a haber realmente lugar para todos.

Felicidades para Vicente, el primer bebé con dos madres en Argentina. Día histórico.

Se acabó el chiste: madre hay una sola y justo me vino a tocar a mí.