Comenzamos por definir extinto, significa que ya no existe en el mundo algún ejemplar de cierta especie y por supuesto la misma ya no podrá recuperarse. Se conocen los animales en peligro de extinción por el término de especies en peligro. Tales animales nunca son especies permitidas para la caza. Generalmente se encuentran en peligro de extinción porque ha desaparecido el habitad que necesitan.

Antes de que se prohibiera la cacería con fines de lucro, algunas especies fueron sobreexplotadas por cazadores comerciales.

Otras especies como el águila calva, han sufrido problemas especiales provocados por el hombre.

Ciertos productos químicos fueron rociados en los cultivos con el propósito de controlar las plagas. Las águilas al comerse estos insectos asimilaron los productos químicos. Los cascarones de los huevos de las águilas intoxicadas se volvieron demasiado frágiles haciendo que se quebraran en los nidos por lo que ninguna cría de águila pudo sobrevivir. Hoy en día el águila calva está clasificada como especie amenazada, no en peligro, pero su población se encuentra peligrosamente baja.

En la cacería reglamentada ninguna especie de fauna silvestre ha sido extinta como consecuencia de la cacería deportiva.

¿Qué podemos hacer los cazadores para ayudar a la fauna silvestre a sobrevivir?

Un buen habitad es clave para la supervivencia de la fauna silvestre. Con alimento, refugio, agua y espacio abundante, la fauna silvestre puede alcanzar la capacidad de carga y sobrevivir las inclemencias del clima, las enfermedades, la depredación, la cacería regulada y otros factores limitadores.

¿Cuáles factores limitantes podemos controlar para ayudar al a fauna silvestre?

No podemos controlar el clima pero sí muchas otras cosas. Ayudar a las poblaciones de fauna silvestre controlando algunos de los factores limitantes es precisamente lo que constituye el manejo de fauna silvestre.

El manejo de fauna silvestre significa controlar el habitad y la explotación del mismo por el hombre para que siempre podamos disfrutar de la fauna silvestre.

El manejo de la fauna silvestre ha ayudado a la fauna a sobrevivir durante los últimos cien años. Algunas especies que apenas existían en poblaciones pequeñas a finales del siglo pasado o a principios del presente ahora exigen con poblaciones más abundantes y sanas.

Entre los mejores ejemplos de esta clase de ayuda que representa el manejo de fauna silvestre son las poblaciones de venados y patos.

Es muy simple, el manejo de la fauna silvestre puede realizarse hasta en el patio de su casa. Por ejemplo usted puede trasplantar más árboles y arbustos para proveer escondites y alimentos para las aves, construir un pequeño estanque para proveer agua o mantener alejados a los perros y gatos para brindarles protección.

¿De qué otro modo puede usted ayudar en el manejo de la fauna silvestre? Quienes formamos parte de la actividad cinegética podemos integrar asociaciones de cazadores deportistas o grupo de conservacionistas. Estas asociaciones participan en el manejo de la fauna silvestre en el ámbito legislativo y también realizan proyectos como voluntarios en el ámbito local.

Usted puede obtener un permiso para cazar a alguna otra clase de permiso, como los sellos para la caza de aves acuáticas, porque aun si usted no los utiliza, los fondos recaudados de tales permisos se dedican a los programas estatales de manejo de fauna silvestre.

Las agencias estatales protegen la vida silvestre para beneficio del pueblo entero con leyes y reglamentos, establecen temporadas de cacería y veda, y desarrollan programas de desarrollo y protección del habitad.