Hay movidas extrañas, los países de occidente, el norte más precisamente se dedica a observar al resto de los países, pero no parece que sea precisamente para tomar ejemplo en asuntos de ética, sociedad o arte, sino en riquezas.

Eso pone incómodo al resto del planeta, el cual se pregunta por qué no armarse para prevenir futuras conquistas, ya vimos lo que hace el país del norte cuando detecta una riqueza que quiere explotar, inventa algo e invade el país que quiera, luego, le dan el premio novel de la paz a su presidente y así siguen con la maquinaria de la farsa.

Recientemente el presidente Iraní, Mahmud Ahmadineyad, ha anunciado que comenzarán a producir Uranio enriquecido, no es necesario especificar qué significa.

En principio: que está previniendo algún tipo de amenaza por alguna razón, y ha decidido publicitar que tiene cómo defenderse. Si pensara en atacar, no lo habría hecho público.

Alemania, es el primer país en contestar como lamentable esa decisión, sobre todo cuando el anuncio se dio a conocer exactamente un día después de una reunión en donde se reunieron diferentes países para tratar temas entre los que se contó la seguridad internacional y en esa reunión se encontraban estadistas occidentales y el ministro de seguridad de Irán, Manucher Mottaki.

300 estadistas y expertos en materia de defensa y seguridad de todo el mundo no previeron que un día después el presidente Iraní se diera el lujo de semejante noticia que algunos ya denominan amenaza, habiendo tenido un ministro en esa reunión que no presentó la idea en esa reunión.

Mientras, el Estados Unidos, insisten que es una amenaza menor, insisten en que ellos tienen bastante con el fantasma de Al Qaeda, desviando la relación entre sus acciones y las acciones con que responden los países que ellos invaden y a los cuales dicen ayudar, sobre todo, política que no parece cambiar con el recientemente laureado Nobel de la Paz, Barak Obama, contribuyendo al desprestigio de ese premio, avergonzando al mundo.

Mientras los políticos y comentaristas, dicen palabras como “lamentable”, “decepción”, los países llamados emergentes, Latinoamérica y países no belicosos, como buenos espectadores externos observamos la pelea por el pastel, y las inútiles advertencias sobre temas importantes como el calentamiento global, la extinción de especies, la propagación de enfermedades incurables, el hambre y la poca motivación en general, por ausencia de mejor ejemplo, caen en un futuro que ellos se encargan de que no exista.

Este aparente desentenderse de Estados Unidos minimizando el hecho me hace pensar que son partícipes concientes.

Algún beneficio están “arreglando” con ese hecho.

Claro, Irán insiste en que es un propósito con fines civiles, no bélicos.

Mientras el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se reunirá para tratar las nuevas sanciones para detener a Teherán en esa intención.

Esto sólo puede terminar en otra invasión, no es preciso imaginar de quién.