El yuan, la moneda china tenga alguna influencia en la estabilidad de la moneda estadounidense, y que el presidente de este segundo país lo admita, es uno de los movimientos políticos y económicos que solo puede haber ocurrido en este momento.
Es una “agachada” histórica, Estados Unidos, siempre ha actuado como un líder económico con una política indestructible de fortaleza en ese género.
Lo ridículo de la situación es que una acusación, no logra nada, al menos visible, ningún país se va a tomar en serio un comentario que no esté respaldado con pruebas.
Lo que plantea una idea aterradora, ¿acaso no recuerda el mundo qué otras acusaciones vacías ha realizado ese país y cuales han sido las consecuencias?
Mientras, desde la cancillería de China contestan: no, el yuan no es culpable del déficit en Estados unidos.
Respuesta de Perogrullo que parece diseñada para cubrir papel prensa que no conduce a nada.
Una acusación vacía que conduce a una respuesta vacía.
El problema de fondo subyace, una nación conquistadora comienza a acusar de ”algo” a otra nación, en el medio, una acción: Estados Unidos vendió armas a Taiwan, a instancia del Dalai Lama, quién fue visitado por Obama, causando irritación al gobierno Chino.
La realidad es que el gobierno estadounidense está armando a un pueblo que sostiene políticas separatistas de china y enemigos históricos de china.
Siempre se ha sabido que el Dalia Lama, sostiene, como siempre la idea de independencia del Tibet de los Chinos a los que considera invasores.
Es difícil pensar que una nación, el Tibet, no tenga derechos propios ya que históricamente es una nación invadida, pero no se puede dejar de pensar en qué pasaría, para quién serían las armas si China no fuera comunista.
En otras palabras, culpar a un gobierno comunista de que sus maniobras alteran la moneda estadounidense es claramente una excusa para colocar en otro plano las relaciones entre dos potencias, entre las cuales en el mapa político terráqueo es una de las únicas que está enfrentando el poder hegemónico del país del norte.
Parece que los problemas con Irak no fueron suficiente, ni importantes, a este Obama, que está vendiendo armas a un pueblo, que seguramente será su aliado en caso de atacar a China, le dieron el premio novel de la paz.
Sólo en Argentina hay situaciones más bizarras que esa.
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