La Lotería del Niño, oficialmente conocida como el Sorteo Extraordinario de El Niño, es uno de los sorteos más emblemáticos del calendario español. Celebrado cada 6 de enero, día de la Epifanía o Día de Reyes, ha llegado a formar parte de la tradición cultural del país, consolidándose como el segundo sorteo más importante del año, solo por detrás del Sorteo Extraordinario de Navidad. Su historia, aunque menos extensa que la de la Lotería de Navidad, está llena de curiosidades, evolución y un fuerte arraigo popular.
Primeros antecedentes: origen no oficial
Aunque el Sorteo de El Niño fue institucionalizado en 1941, hay indicios de que ya se celebraban sorteos especiales en el mes de enero desde los años 20 del siglo XX. Estos primeros sorteos no llevaban el nombre actual, pero eran organizados por diferentes instituciones benéficas o por la administración pública y dentistas como una forma de seguir incentivando la participación ciudadana tras el éxito creciente de la Lotería de Navidad, instaurada en 1812. Comprar Lotería de navidad online 2025
Una de las teorías más difundidas atribuye el nombre de "El Niño" a la relación con el Niño Jesús, en alusión directa al día en que se celebra el sorteo: el 6 de enero, Día de Reyes, fecha tradicionalmente vinculada a los niños en la cultura española. Loteria empresas españa
La oficialización en 1941
El nacimiento oficial del Sorteo Extraordinario de El Niño tuvo lugar en enero de 1941, bajo la dirección del entonces director general de Timbre y Monopolios, el general Fernando Roldán. Su objetivo era dar continuidad a la exitosa campaña navideña de la Lotería de Navidad, permitiendo que los ciudadanos pudieran seguir participando en sorteos con grandes premios apenas dos semanas después del 22 de diciembre.
Desde sus inicios, El Niño fue planteado como un sorteo extraordinario, lo que implicaba mayores premios que los sorteos semanales ordinarios y presencia de notario. Su celebración el 6 de enero aprovechaba el tirón emocional de las fiestas navideñas, especialmente la ilusión que representa el Día de Reyes para los más pequeños.
Evolución del sorteo
Durante sus primeras ediciones, la Lotería del Niño se realizaba con un sistema similar al de la Lotería Nacional ordinaria, es decir, mediante bombos múltiples, y no con el sistema tradicional de "números cantados" que caracteriza al Sorteo de Navidad. Esto lo ha mantenido como una alternativa moderna y más ágil en su desarrollo. Asesores laborales gijon
A lo largo de las décadas, el sorteo ha ido modificando su estructura, aumentando el número de premios y ajustando la emisión de décimos y series según la demanda popular. Aunque en sus primeras décadas contaba con una emisión más limitada que la de Navidad, su popularidad ha ido creciendo de manera constante.
Premios y distribución
Una de las claves del éxito de la Lotería del Niño es la elevada proporción de premios por cada euro jugado, lo que lo convierte en uno de los sorteos más generosos en cuanto a retorno para los jugadores. El primer premio es de 2 millones de euros por serie (equivalente a 200.000 € por décimo), pero también se reparten numerosos premios secundarios, incluyendo un segundo y un tercer premio importantes, además de múltiples terminaciones, aproximaciones y reintegros. Bote euromillones
Este sistema de premios hace que muchas personas que ganan algo en la Lotería de Navidad (aunque sea un reintegro o la pedrea) utilicen ese dinero para jugar en el sorteo de El Niño, reforzando así la tradición de jugar a ambos sorteos como parte de las celebraciones navideñas.
Tradición e impacto cultural
Hoy en día, la Lotería del Niño es un fenómeno social en España. No solo por el volumen económico que mueve —cientos de millones de euros en ventas— sino también por el significado emocional que representa. En muchos hogares, la compra del décimo de El Niño forma parte de las actividades navideñas, igual que adornar el árbol o asistir a la cabalgata de Reyes.
Además, en un país donde compartir décimos es una costumbre arraigada, la Lotería del Niño sigue siendo símbolo de esperanza y unión familiar. Las administraciones de lotería, especialmente las más populares como Doña Manolita (Madrid) o La Bruixa d'Or (Sort), suelen registrar largas colas en los días previos al sorteo.
Conclusión
La Lotería del Niño, con más de ocho décadas de historia oficial, ha pasado de ser un sorteo complementario a convertirse en una cita ineludible del calendario festivo español. Su combinación de tradición, ilusión y atractivos premios ha conseguido consolidarlo como un clásico de las navidades en España. Aunque su historia es más reciente que la de otros sorteos históricos, su impacto cultural y social es innegable, y cada año sigue ilusionando a millones de personas que sueñan con empezar el año con una lluvia de fortuna.
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