En principio, ya no se pude ignorar que solamente con un sitio Web se tiene “presencia” en internet.

Tener un sitio web es, meramente, como abrir una tienda en un ignoto edificio, dentro de un departamento, los únicos que se enteran son los vecinos.

Es, incluso un ejemplo burdo, ya que en Internet no hay vecinos, nadie puede “asomarse” a ver, un sitio es un hecho aislado, del que se enteran amigos y parientes, mediante nuestra comunicación.

Luego hay espejismos, gente que genera un sitio,  por ejemplo: nadie.com.ar y cuando coloca en el Google “Nadie”, el sitio aparece, entonces toman eso como presencia en Internet. Esa gente no tiene en cuenta que nadie conoce a Nadie, de manera que ese nombre no será utilizado por los clientes.

En otras palabras: hay que tener en cuenta que tener el sitio web, es el primero de una serie de largos pasos, y sobre todo, no con cualquier sitio se pueden dar esos pasos.

No basta el sitio hecho, sino además debe contener condiciones expresamente para que sea fácil a los buscadores clasificar el contenido e informar a los clientes adecuados.

Cualquiera puede hacerse un sitio, pero no cualquier sitio puede posicionarse, es el momento de contestarse a sí mismo: es uno de los ítems importantes por los que varían los precios.

Hay muchas cosas gratis en Internet, sitios, servicios, blogs, aplicaciones, pero es muy difícil que esos sitios contemplen procesos necesarios para tener un buen negocio con el sitio.

Una forma de lograrlo es por sí mismo. Esto requiere de estudio previo e investigación.

El error más común que vemos desde nuestra empresa es creer todo lo que se dice y llevar a cabo acciones de posicionamiento sólo por haberlo leído, sin comprender que las estrategias dependen del rubro y de la situación de la competencia.

Hemos notado que hay una gran cantidad de actividad de “intercambio de vínculos”, sin mucho objetivo, usando una gran cantidad de recursos y gasto de energía y tiempo inútil.

Es por eso en tal caso, nosotros recomendamos leer artículos al respecto de vínculos calificados.

Sin embargo no es una acción necesaria, entre nuestros clientes no contamos con esa actividad en ningún caso. No sólo porque es una actividad que generalmente es detectada por los buscadores y penalizada, sino porque es un acto que interviene sobre políticas de diseño, y requiere de un administrador que se ocupe de realizar la actividad, generalmente infructuosa, porque muchos saben que es una actividad que no alientan los buscadores, sino por el contrario.

Aún así, hay que tener en cuenta que no es una recomendación, como se dijo antes, las estrategias de posicionamiento dependen de cómo está hecho el propio sitio, primero, después de la situación de la competencia, y recién se estiman las actividades necesarias.

Ante la pregunta de si son necesarias actividades de posicionamiento se puede pensar como la diferencia entre tener un negocio en una calle y publicitar ese negocio en la tv.

El poder de la publicidad ya está ampliamente probado, de manera que lo recomendable, antes de realizar un sitio web, no es pensar en el costo del sitio, sino en el costo de convertir el sitio en un negocio viable.

Tenga en cuenta que el costo del sitio es de aproximadamente el 10 % del valor que le costará convertirlo en un sitio bien posicionado.

Posicionado significa que en cuanto alguien coloca las palabras del rubor que usted ofrece, encuentra a su sitio, primero entre los miles o millones de vínculos registrados en los buscadores.

La mayoría de las empresas generadoras de publicidad emiten el mensaje de que crear  una web o un blog es necesario, lo que ninguna indica es cómo, ni tampoco llama la atención sobre el tema, sencillamente enuncian.

Cualquiera puede realizar actividades para posicionar un sitio, lo que no pasa, es que la casualidad ayude, hay que aprender, estudiar, estar informado, todo el tiempo cambian las condiciones porque los buscadores cambian sus formas de registro, en el afán de ofrecer más y más servicios.

En otras palabras: es muy fácil aprender cuáles son las acciones a llevar adelante, hay que estudiar, y luego llevarlas a cabo.

Es relativamente fácil crear el plano de la casa propia, basta con estudiar , o se emplea a alguien para ello mientras uno se ocupa de cosas que sabe hacer o se contrata a alguien para que realice el trabajo.