No cabe duda que el desarrollo intelectual de la humanidad en su conjunto nos ha llevado a sobrepasar muchos límites que sólo estaban dentro de nuestra imaginación hace tan sólo un siglo atrás. Vemos ahora cómo las nuevas tecnologías –producto de años de investigación y estudio dentro de las universidades-, no sólo logran satisfacer nuestras necesidades y han hecho tangibles nuestros sueños, sino que, dentro de instituciones como la universidad de Santander, motivan a los estudiantes a seguir innovando, abriendo así un abanico amplísimo de posibilidades para que nuestro futuro sea aún más brillante que ahora.
Diferentes formas de crecer
A todo el desarrollo tecnológico, que es demasiado evidente, podemos sumarle el desarrollo en investigación en otras áreas dentro de la misma universidad. De este modo, podemos ver que un grado en marketing, o en psicología, o en sociología, o en alguna otra carrera demuestran que la vida del hombre cambia también desde lo profundo de su ser; por eso, se centran en desarrollar el conocimiento de las actitudes de las personas. Nunca es un desperdicio de tiempo centrarse en lo que interiormente le inquieta a una persona y eso crea las bases para un desarrollo mucho más integral.
Por otro lado, si bien ahora las universidades se están especializando en determinadas ramas del conocimiento, siempre tienen en cuenta que el estudiante debe desarrollarse en un ambiente que lo motive de muchas formas a crecer como profesional.
De ese modo, un grado en marketing o en psicología estará siempre precedido de estudios de ciencias básicas además de todo el grueso de información que tienen de su especialidad. Porque no basta con conocer sólo de lo que te especializas, sino también de otras carreras. Es por eso que las universidades son un buen ambiente para desarrollarse: Porque dan diferentes visiones del mundo a todo su alumnado y fortalecen su desarrollo intelectual de acuerdo a su especialidad. Si a eso le sumamos el clima social entre los mismos alumnos, el desarrollo humano es casi completo. |