A lo largo de su vida, al perro le encanta jugar, lo cual se nota desde muy pequeño ya que a la edad de tres o cuatro semanas, los cachorro empiezan a jugar mediante la simulación de la lucha o la caza, tratando de atrapar su cola o tomando las cosas en su boca, aunque para ellos es más que un juego puesto que con el juego el cachorro aprende las reglas de la vida, es antes de nada un tema de instinto de caza y de supervivencia.

La etapa en que los perros aprenden a jugar es muy importante para marcar su comportamiento en el futuro, en esta fase de edad los cachorros tienen que entender que su amo, a pesar de que esta, tiene una gran ventaja sobre ellos, por tanto si les marcamos los límites, ellos lo entenderán y actuarán de la forma que su amo diga, si no les queda claro la superioridad del amo, los juegos de los perros pueden convertirse en una pesadilla.

Sin embargo hay que saber bien como mostrar esa ventaja que el amo tiene sobre su cachorro, cuando el amo juega con su perro no puede de repente castigarle, el perro no lo entenderá y ello causará sensación de inseguridad por parte del perro, hay que saber muy bien como mantener la línea de educarlos sin maltrato ninguno.

El juego, es la mejor forma de entrenar a los perros sobre todo cuando les premiamos después con una buena comida de perros.

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José Rodríguez

Marketing y Comunicación