El encuentro fue en el Club Imperio, aproximadamente 11 grados indicaba el termómetro. Primer frío importante del año.
A media sombra y sol, los directivos de la carrera llegan, aunque ya se había preparado la pista y se estaban probando los autos.
En esta ocasión, fórmula 1.
La historia de la carrera en Fórmula 1 se remonta desde 1947, cuando la Federación Internacional del automovilismo normaliza y regula las actividades de las carreras automovilísticas.
Hasta entonces, se corrían carreras en Francia –Grand Prix-; desde 1894, en caminos simples, sin reglas, verdaderas proezas de resistencia de autos y pilotos.
La velocidad, la tecnología y el movimiento económico y de atracción las convirtieron en un espectáculo deportivo, con no pocos accidentes en el camino.
El circuito que se utilizaba eran caminos públicos, cerrados eventualmente durante la carrera; debido a ello no hubo pistas normalizadas, sino grandes nombres de ciudades, y escuderías que participaban. Poco antes de la guerra, los grandes nombres eran sinónimo de ingeniería automovilística, Alfa Romeo, Ettore Bugatti, Enzo Ferrari, Vittorio Jano, Alfieri Maserati, Mercedes-Benz, Harry A. Miller, Ferdinand Porsche
Hasta el momento había no poco desorden y ambigüedades, por primera vez en 1933, en el gran premio de Mónaco se toma la determinación de tener en cuenta los tiempos de clasificación, dejando de lado el factor suerte o desempeño fortuito de los coches.
Irónicamente, mientras en los autos de Fórmula 1, la reducción del peso es un factor importante para su desempeño, en los modelos a escala que replica aquellos modelos, según el tamaño, el peso se aumenta. Lograr el peso adecuado para el buen desempeño del coche, requiere de habilidad e imaginación, puesto que no hay piezas dentro de los autos enmasillados, hay plomo, masilla, ingenio, dedicación.
En la imagen vemos el área de verificación del tamaño y peso de los coches.
Desde aquel primer momento y hasta hoy, las carreras de Fórmula 1, han tomado una dimensión compleja, incluyen situaciones que involucran la política, como el secuestro del piloto Juan Manuel Fangio en Cuba, en 1958, que con 46 años era el piloto que más carreras Fórmula 1 había ganado; momentos tristes, como accidentes fatales de pilotos, -un recuerdo especial para Ayrton Senna, piloto Brasileño, -, así como momentos bizarros, como el Gran Premio de Hungría, en 2010, que los diarios del mundo replicaron por la gran cantidad de actitudes poco deportivas que se registraron, consejos del diablo a los pilotos; en aquel entonces el suceso más comentado fue cuando el piloto alemán Michael Schumacher, sobre el final de la carrera sacó de la pista a su antiguo compañero de escudería Rubens Barrichiello, en una maniobra poco deportiva, misma carrera en la que hubo record de pilotos penalizados por diferentes situaciones.
A escala, el “Fangio” de los autos enmasillados a mano control es el piloto Fabián Mossato. Aunque larga último toma los primeros puestos durante la mayoría de las carreras. Vemos en la imagen el momento en que disputa la delantera con el piloto Iván Rosa. El piloto Iván Rosa cuenta con 13 años de edad, destacado en la categoría infantil; respira sobre el guardabarros del múltiple campeón Mossato.
Puede apreciarse en tiza, las marcas de los numeros de los coches que ocuparon el puesto al momento de la largada. La escena muestra los coches cerca de la línea de llegada, antes de completar la primera vuelta.
Este es otro momento de la carrera, donde los pilotos Fabian Mossato e Iván Rosa disputan el primer puesto, en la distancia media del circuito.
Aquí vemos al auto del piloto Iván Rosa (13 años), pasando la línea de llegada de la primera vuelta, ganando puntos, atrás a pocos centímetros el auto del piloto Fabíán Mossato, mordiendo la línea de llegada y en tercer lugar, discretamente acercándose el piloto Hugo Cella.
Con 32 pilotos participantes, no se pueden esperar pocas polémicas, al final de esta nota se pueden encontrar algunos videítos sorpresivos, que nuestra cámara ha captado con no poca malicia.
Situaciones que más allá de las polémicas, el calor de la pasión, no es menor a pesar de la escala de los coches.
Hubo momentos de conflicto y de análisis para los jueces, debido a los diversas situaciones que se suscitaron respecto a las reglas y a criterios, aquí vemos una secuencia de medición, para determinar cuál de los dos coches que lideraban la carrera se encontraba delante, se dirimía entre los dos pilotos quién llevaba la punta, el que estuviera delante, tenía para sí la recta hacia la llegada; el fin de la primera vuelta estaba en juego, lo cual otorga puntos.
Vemos el auto de color verde, del piloto Iván Rosa, y el azul, del piloto Fabián Mossato, por breves centímetros el del piloto Hugo Cella.
El juez, Agustín Vivo, midiendo las distancias.
Se controla que cuál de los autos, enfrentados a la curva se encuentra adelante.
Las medidas intentan ser justas para ambos pilotos. El número 1, del piloto Fabián Mossato, el coche verde, del piloto Iván Rosa. El auto amarillo es del piloto Gabriel Chervet, que estuvo en el puesto 4 la mayor parte de la carrera, pero que fortuitamente fue perdiendo puestos.
Ambos pilotos esperan salir primeros de la posición, ya que es prácticamente el último tiro hacia la línea de llegada. Sin ser el final de la carrera, pues faltan dos vueltas más. El primero que traspasa la llegada en esta primera vuelta, recibe puntos extras. Antes vimos que finalmente lo consiguió el piloto Iván Rosa. Felicitaciones al piloto por el gran logro. Debido a la coyuntura de desafiar al campeón Mossato, se convirtió en el favorito y el más alentado para conseguir superarlo.
En esta imagen vemos al piloto Fabián Mossato, ya con el puesto primero, a punto de lanzar su coche.
Luego le toca el turno a Iván Rosa, agachado, preparandose para enviar su coche, y parado a su derecha -izquierda nuestra-, con el equipo de San Lorenzo, el piloto Hugo Cella, midiendo la situación, no sólo porque estaba en el puesto 3 y lanzaba luego del piloto Iván Rosa, sino porque además fue nombrado Juez en este encuentro.
Es obligación de un juez controlar que los tiros sean correctos y que el punto de lanzamiento sea el correcto también.
El resultado parece previsible, aunque con no pocas sorpresas.
El campeón, Fabián Mossato, el segundo premio Marcelo Vivo, tercer premio para el piloto Hugo Cella.
El héroe de la jornada, Iván Rosa, que mantuvo en vilo a la concurrencia por estar peleando el puesto con el campeón usual, entró en el puesto 5, con no poco mérito. El piloto Marcelo Lauría se quedó con el puesto 4.
Aquí vemos a los campeones exhibiendo sus premios.
Marcelo Vivo, Fabián Mossato, Hugo Cella.
Los coches de los ganadores:
Momentos previos al encuentro
Plan de la pista. Vemos al piloto Marcelo Lauría, a cargo de la preparación, con el plano del circuito.
Durante los momentos de prueba, algunos coches muestran defectos, aquí vemos reparando sus coches a los pilotos Fernando Marcolli y Gabriel Chervet.
Momento de espera, luego de la verificación, el piloto José Aramburu, en actitud que no se sabe si de espera, fiaca, pensamiento, pero seguro que no de obra.
En palabras del piloto: 'Estos campeonatos son una excusa para el mate, las factura y el encuentro con amigos que comparten la misma pasión, el verdadero disfrute es cuando estamos en casa construyendo los coches, pintándolos, probándolos'.
En la mesa vemos el símbolo que representa el encuentro, facturas, autos, caja de herramientas.
Caja de herramientas del piloto Hugo Cella, con repuestos y modelos.